Construída sobre siete colinas, la "Roma francona" conserva uno de los mejores centros históricos de Alemania, porque tuvo la suerte de no ser destruida en la segunda guerra mundial. Desde 1993 es patrimonio universal de la Unesco.
En su catedral, están enterrados sus fundadores, el emperador Enrique II de Baviera y su mujer Cunigunda.....además de su obispo, que llegó a ser Papa, Clemente II.
El antiguo ayuntamiento, se asienta sobre una isla artificial, en mitad del río Regnitz....se considera la frontera entre la ciudad burguesa y la ciudad obispal. Es precioso.....parece de postal.
Al otro lado del río, se encuentra, lo que llaman, "la pequeña Venecia", por las casas a orillas del río y sus barcas aparcadas en la puerta.
Frente a la catedral, encontramos, lo que se llama la Nueva Residencia, con fachada barroca, y que a finales del s. XVII, el más famoso de los obispos príncipes de Bamberg, Lothar von Schönborn, quería para Bamberg un conjunto similar al castillo de Praga, y encargó al arquitecto praguense Johann L. Dietzenhofer, esta magnífica obra.
Y terminando de subir la montaña, encontramos el monasterio de Michelsberg, un convento benedictino del s. XI, en el que se encuentra el Museo de Cerveza de Franconia....la cual visitamos por dentro y vimos todos los elementos para elaborar la cerveza.
Bamberg es la ciudad de la cerveza, por excelencia, y tiene fama su "Rauchbier" o cerveza ahumada....solo en esta ciudad hay nueve fábricas de cerveza.
Pero, a pesar de estar todo el día lloviendo, no nos perdimos nada....íbamos con nuestros paraguas a todos lados, para no perdernos detalle.....fué muy bonito e interesante, ver tanta historia junta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario